viernes, 16 de noviembre de 2012

DIARIO DE GUERRA

SEDAN 1940

Charles de Gaulle
Paul Reynaud
Wiston Churchill, recibió una desesperada llamada telefónica Paul Reynaud, el primer ministro francés, en ella decía: “Estamos derrotados… El camino hacia París está despejado”. Charles de Gaulle, intento desesperadamente lanzar tres contraataques sobre el cuartel general avanzado de Guderian, mientras los soldados franceses se reagrupaban rápidamente en la ciudad de Montcornet, al norte de París. En torno a Dunkerque trazaron un perímetro con el fin de que las tropas francesas y británicas tuvieran un lugar de retirada. Si los mandos aliados no eran capaces de sacar a sus tropas de allí, se convertirían en simples marionetas para nuestras tropas y nuestros panzer, sería una autentica carnicería. En la retirada el 21 de mayo, se encontraron cerca de la localidad de Arrascon, con la 7ª Division panzer y la Division Totenkopf de las Waffen SS. A pesar de la resistencia aliada los acorazados alemanes penetraron hasta la costa, dos días más tarde. La fuerza expedicionaria Británica estaba bloqueada. Y para suerte nuestra el ejército belga capituló el 28 de mayo.

Toma de París
Totenkopf SS
Tras la batalla, había muchas razones para explicar porque el Führer ordeno a Guderian que detuviera sus tropas en Dunkerque. Porquqe el terreno pantanoso junto a la costa no era el más factible para los tanques, por el contratiempo de Arras o porque Von Rundstedt deseaba reagrupar todas las fuerzas, para preparar el asalto a París. Churchill no permitiría que los franceses quedaran fuera de la guerra, para ello envio todos los refuerzos a su disposición para que desembarcaran en Brest y Cheburgo, pero la presencia de los Stukas y los panzer, no lo pondrían nada fácil. El 14 de junio, la implacable y destructora fuerza de la Wehrmacht se paseaba por París, como si de la propia Berlín se tratara. En unos pocos meses, el interés de nuestro líder, se tornaría hacia el Este, hacia los malditos rusos. Quizás, ese fue un error que pagaríamos muy caro en el futuro, o tal vez no.

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Fuente: Grandes Batallas de la II. G.M. Editorial: Dr Chris Mann.

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